La movilidad eléctrica en España ha experimentado un crecimiento significativo en los últimos años, reflejando la creciente conciencia ambiental y la búsqueda de alternativas sostenibles al transporte tradicional basado en combustibles fósiles. España ha realizado importantes inversiones en infraestructura de carga, con una red en constante expansión de estaciones de carga para vehículos eléctricos en todo el territorio. Las administraciones públicas también han dado pasos con propuestas legislativas que han dinamizado el sector.
Sin embargo, existen desafíos que deben abordarse para impulsar aún más la movilidad eléctrica en España. Todavía queda mucho por hacer para cumplir los objetivos impuestos por Europa en términos de movilidad eléctrica. A pesar de estos desafíos, España se encuentra en una posición favorable para continuar su transición hacia la movilidad eléctrica, aprovechando su clima soleado para la generación de energía solar y promoviendo la adopción de vehículos eléctricos como parte integral de su estrategia para combatir el cambio climático y mejorar la calidad del aire en las ciudades.
Para ahondar en esta cuestión, THE OBJECTIVE organiza la mesa de debate ContexTO: movilidad eléctrica en España, a la cola de Europa, ¿cómo podemos acelerar?, en colaboración con Endesa. Participan Manuel Muñoz, director de ventas y marketing de Endesa X Way, María Romera, directora de regulación y asuntos públicos de la Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso de la Movilidad Eléctrica (AEDIVE), y Antonio Lucio, especialista en movilidad urbana y sostenibilidad y presidente de WWF. Modera el debate el periodista de THE OBJECTIVE Javier Leal.
La importancia del respaldo de las administraciones
«No estamos yendo a la velocidad que debiéramos haber ido, porque el objetivo ya tiene unos años y no hemos cumplido y no estamos donde pensábamos que podríamos estar», reconoce Manuel Muñoz, director de ventas y marketing de Endesa X Way. «Hay que acelerar. Muchas veces la administración pública peca de poner el dato, pero no decirnos o no ayudarnos en el cómo. Esa es la gran dificultad que tenemos. Hemos hablado antes de la demanda, la oportunidad. Tenemos un parque de vehículos de 14 años de antigüedad en promedio. Esa flota de vehículos hay que renovarla. La potencialidad está ahí», explica.
Y lanza un llamamiento a las administraciones públicas: «Nosotros ofrecemos servicio de recarga, hacemos esa inversión anticipada para convencer, para que el usuario adopte la movilidad eléctrica. No nos gusta la imposición, nos gusta la adopción por conveniencia, pero también nos lo tienen que facilitar. No puede ser que tardemos un año y medio en instalar un punto de carga, que tardemos otro año adicional en ponerlo operativo y al final todo se vuelva en nuestra contra porque el usuario ve un punto de recarga que está instalado pero que no opera. Piensa que somos nosotros, que no lo mantenemos… Necesitamos que la administración pública nos ayude, nos acompañe, nos dé las herramientas de cómo hacer las cosas. Las empresas privadas conocemos el oficio».
«Tenemos una estrategia comercial de inversión, queremos poner los puntos de recarga para atender a esos cinco millones de vehículos eléctricos que creemos que se puede llegar, pero no podemos dejar pasar un año más sin que esto acelere y se incremente la penetración de vehículos y sin que existan esas medidas para que haya esa renovación del parque de vehículos tan antigua que tenemos hoy en España», concluye.
España, líder en fabricación de puntos de recarga
España se marcó el objetivo de cinco millones de coches eléctricos para 2030, pero las ventas siguen siendo insuficientes. Para María Romera, directora de regulación y asuntos públicos de la Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso de la Movilidad Eléctrica (AEDIVE), este es «un objetivo ambicioso». La buena noticia, apunta, es que «estamos avanzando, hemos avanzado mucho, con mucho esfuerzo, todavía nos queda un largo recorrido para que efectivamente podamos hablar de un mercado ya maduro». Ahora mismo, este es «un mercado emergente».
Romera destaca además un sector clave: el de los fabricantes de puntos de recarga. «Hay una industria española que ha apostado. Somos líderes en el mundo». Y da datos: «El 87% de los cargadores que se han producido en el año 2022 se ha exportado a mercados de Latinoamérica, Asia, América, Estados Unidos… Esto hay que ponerlo en valor. Detrás de la movilidad está generándose una industria, unos actores que todos están apostando con inversiones cuantiosas. El 25% de la industria de de la fabricación de puntos de recarga invierte en I+D, o sea que verdaderamente estamos en un momento en el que hay industrias que están en torno a la movilidad y efectivamente hay una apuesta decidida».
