Tras el paso del huracán Ian por Florida (EE UU), muchos coches que estaban sumergidos se han incendiado al salir a la superficie
Los bomberos del Estado de Florida, en Estados Unidos, no dan abasto para apagar las decenas de coches eléctricos que han comenzado a arder por sí solos.
Se trata de los turismos que han estado sumergidos en agua salada, a raíz del paso del huracán Ian por esta zona, y que han aparecido días después. Al parecer, el origen de la combustión está en la reacción química producida por la mezcla del litio de las baterías con el agua salada del mar.
Las imágenes se tomaron en el distrito de North Collier, con un Tesla que se resiste a ser apagado. Ante esta situación, los bomberos han pedido a los propietarios de coches eléctricos que hayan sufrido las inundaciones que los saquen de los garajes y los trasladen hasta zonas despobladas donde no supongan ningún riesgo si se incendian repentinamente.
motor.elpais.com