Por sorpresa y casi con nocturnidad, Nissan lanzó este año en Japón un nuevo modelo al que no se le ha dado mucha publicidad. Un coche eléctrico urbano que no destaca especialmente en ningún aspecto. Cumple en lo estético, tiene unas prestaciones correctas, pero se ha convertido en el más vendido de su mercado. La razón, su bajo precio.
El Nissan Sakura es un diminuto kei car cuya demanda ha superado con creces las previsiones de la marca, que se ha visto obligada a dejar de aceptar nuevos pedidos tras alcanzar una lista de espera de más de un año.
Con un precio de partida de 2.333.100 yenes (14.680 euros al cambio), este diminuto automóvil resulta verdaderamente asequible; además, no debemos perder de vista que, al igual que el resto de kei cars, se beneficia de numerosas ventajas fiscales y ayudas del gobierno, que dejan su precio en unos más que apetecibles 1.93 millones de yenes, o 12.200 euros al cambio.
Por ese dinero, los japoneses se llevan a casa un modelo con un cuerpo de 3,4 metros de largo, 1,48 metros de ancho y 1,66 metros de alto, con una batalla de 2,5 metros. Está homologado para cuatro plazas y dispone de un maletero de apenas 107 litros. Su motor eléctrico ofrece 47 kW (64 CV) de potencia y 195 Nm de par, pudiendo alcanzar una velocidad punta de 130 km/h.
Su batería cuenta con una capacidad de 20 kWh, le proporcionan una autonomía de 180 km WLTC. Dispone de un sistema de carga rápida, gracias al cual pasa del 10 al 80% en apenas 40 minutos. Además, también se trata de uno de los pocos coches eléctricos del panorama actual en ofrecer carga bidireccional, por lo que puede convertirse en un generador eléctrico móvil.
Nissan Sakura, el más vendido de Japón en 2023
Todo esto le ha hecho ganarse al público japonés, y entre enero y septiembre el Sakura acumula un total de 35.099 unidades matriculadas. Algo que le permite superar a todos sus rivales dentro del sector de los eléctricos.
Un dato que además tiene especial relevancia en un mercado, el de Japón, que apenas ha mostrado interés en el coche eléctrico, y donde la cuota de ventas de estos, y añadiendo a los híbridos enchufables, se quedó el pasado año en un pírrico 2%.
Pero en vista del enorme éxito del Nissan Sakura, es posible que a corto plazo otros fabricantes autóctonos se animen a lanzar sus propios kei cars eléctricos para hacerse con un trozo del pastel. ¿Nos encontramos ante el inicio del auge del coche eléctrico en Japón? Lo más probable es que salgamos de dudas a corto plazo.
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