Los fabricantes de automóviles chinos ante la inminente decisión de la Unión Europea (UE) acerca de los aranceles a la importación de sus coches eléctricos adoptan un enfoque cauteloso. A medida que el mercado europeo de vehículos eléctricos evoluciona, el compromiso de inversión en Europa por parte de estas empresas toma una relevancia aún mayor.
La apuesta de los fabricantes chinos por Europa
Los fabricantes de automóviles chineses, al ser consultados sobre las actuales tribulaciones comerciales, han decidido esperar las declaraciones de sus casas matrices en el gigante asiático. Este movimiento estratégico refleja la importancia de un enfoque unificado ante el desafío de los aranceles.
Volvo Cars: Compromiso con la inversión y producción local
Volvo Cars, que forma parte de Geely Holdings, ha confirmado su intención de mantener un fuerte compromiso en Europa. La empresa ha reiterado su estrategia de producción local, enfatizando que “continuarán con nuestra estrategia a largo plazo de construir nuestros coches donde los vendemos”. Este enfoque se materializa con la mejora de su planta en Gante, Bélgica, donde se prevé que inicie la producción del modelo eléctrico EX30 en 2025.
Además, Volvo ha indicado que sus inversiones en fábricas en la Unión Europea están vinculadas a actividades de investigación y desarrollo, proyectando un futuro que se alinea con las tendencias de sostenibilidad y electrificación del sector automotriz.
Chery: Defensa de los consumidores y decisión ante los aranceles
Por otro lado, Chery, una compañía que ha empezado a ganar presencia en el mercado español con sus marcas Omoda y Jaecoo, ha manifestado su disposición para mantener los precios estables. Según Francesco Colonnese, director de ventas en España, “no se puede permitir que algunas decisiones afecten al consumidor final”. Esta declaración resalta su compromiso por favorecer la adquisición de coches electrificados, aspecto crucial en un contexto de creciente concienciación ambiental.
Sin embargo, la respuesta de Chery a los nuevos aranceles implica un retraso en la producción del modelo Omoda 5 EV, que ahora se espera para octubre de 2025 en la Ebro Factory de Barcelona. Este retraso pone de manifiesto las dificultades que afrontan los fabricantes ante un entorno normativo y fiscal cambiante.
BYD y MG: Estrategias en un mercado incierto
Desde BYD, otro gigante de la automoción, han adoptado una postura de espera. La empresa está valorando la situación y cómo afectará a sus operaciones. En el caso de MG, perteneciente a SAIC Motor, ha expresado en el ámbito internacional su preocupación por los aranceles, calificados de “excesivos”, ya que podrían obstaculizar la transición hacia una movilidad más verde en Europa. No obstante, hasta el momento, la compañía ha afirmado que no se verán obligados a incrementar los precios de sus vehículos.
Localización de fábricas: claves para el futuro
Uno de los puntos críticos en la estrategia de MG es la decisión sobre la ubicación de su futura fábrica de vehículos eléctricos en Europa. Recientemente, el embajador de China en España, Yao Jing, mencionó la posibilidad de construir dicha planta en Aragón, lo que podría facilitar un mejor posicionamiento frente a los aranceles. Además, se están considerando otros países como Hungría y República Checa, donde los costes laborales son más bajos, lo que podría facilitar las operaciones en el viejo continente.
Aranceles y sus implicaciones en la industria automotriz
Nuevos aranceles: estructura y cifras
La propuesta de la UE establece un incremento significativo en los aranceles a las importaciones de coches eléctricos, elevándolos hasta un 45,3% para algunos fabricantes, a partir del 31 de octubre. Este aumento se suma al 10% que ya se aplica, representando un cambio radical en las condiciones de competencia para los fabricantes chinos.
Detalle de los aranceles por fabricante
- SAIC: 35,3% (reducción respecto al 36,6% inicial)
- Geely: 18,8%
- BYD: 17%
- Tesla: 7,8% (reducción del 9% inicial)
- Otros (que han cooperado): 20,7%
Este cambio en la política arancelaria no solo plantea desafíos, sino también oportunidades para los fabricantes que estén dispuestos a invertir en Europa y adaptarse a las nuevas normativas.
La importancia de la inversión en I+D
Las inversiones en investigación y desarrollo dentro de la EU son vitales para el futuro del sector. Los fabricantes están priorizando soluciones sostenibles y tecnologías avanzadas que les permitan mantenerse competitivos en un mercado en rápida evolución.
El hecho de que empresas como Volvo o Chery estén enfocadas en I+D indica que el futuro no solo depende de la producción, sino de mejorar la calidad e innovación de los productos lanzados al mercado.
Motor 16