De acuerdo con el informe más reciente de Transport & Environment (T&E), en 2024, casi la mitad de los autobuses urbanos adquiridos en la Unión Europea fueron completamente eléctricos, y las proyecciones indican que, si se mantiene esta tendencia, para 2027 esta cifra llegará al 100 %.»
«De este modo, los autobuses totalmente eléctricos han tomado la delantera en la transición hacia un transporte público más sostenible, superando a los modelos híbridos y de hidrógeno, que hasta hace unos años se perfilaban como la gran esperanza para disminuir las emisiones en las áreas urbanas.
El auge imparable de los autobuses totalmente eléctricos en Europa
«En 2024, el 46 % de los nuevos autobuses urbanos en Europa eran eléctricos, posicionándose como la alternativa predilecta para la mayoría de las ciudades. Este crecimiento acelerado se debe a factores como la reducción de costes operativos, mayor eficiencia energética y la mejora de las infraestructuras de recarga urbana.
Los países europeos que están liderando esta transición según los datos de (T&E), son Países Bajos, Finlandia e Islandia: en todos, el 100 % de los nuevos autobuses urbanos en 2024 ya eran eléctricos. En España, la cuota de autobuses de emisiones cero alcanzó el 57 %, superando al Reino Unido (56 %). Alemania y Francia, aunque a menor ritmo, también avanzan en esta dirección.
Aunque en su momento se consideró una alternativa viable, los autobuses de pila de combustible de hidrógeno han quedado rezagados. En 2024, apenas representaban el 3 % de las ventas según T&E, y países que apostaron por ellos han dado marcha atrás. Los Países Bajos, que en 2021 destinaban un 20 % de sus nuevas compras de autobuses urbanos al hidrógeno, han abandonado completamente esta tecnología.
Los motivos son evidentes: los autobuses de hidrógeno resultan considerablemente más costosos de adquirir, operar y mantener en comparación con los eléctricos de batería. Ciudades como Montpellier (Francia) o Bolzano (Italia) han evidenciado que el gasto por kilómetro de un autobús de hidrógeno puede duplicar al de un modelo eléctrico.»
«Asimismo, la infraestructura de recarga de hidrógeno implica un alto coste y presenta poca fiabilidad, como ocurrió en Wiesbaden (Alemania), donde una estación de hidrógeno, construida con una inversión de 2,3 millones de euros, dejó de funcionar al cabo de un año, paralizando toda la flota.
Según los datos analizados por T&E en su estudio, los autobuses eléctricos no solo implican gastos operativos más bajos que los de hidrógeno, sino que también destacan por su mayor eficiencia. Mientras que los autobuses con batería consumen entre 137 y 154 kWh por cada 100 km, los de hidrógeno requieren más del doble, con un consumo que oscila entre 310 y 336 kWh. Esta brecha convierte a la electricidad utilizada directamente en los autobuses eléctricos en una alternativa mucho más eficiente y respetuosa con el medio ambiente.»
«Por otro lado, la fiabilidad se perfila como un aspecto determinante. Al comparar ambas tecnologías, los autobuses eléctricos presentan menos incidencias mecánicas y menores necesidades de mantenimiento en contraste con los de hidrógeno, que dependen de sistemas más complejos y costosos de reparar. Ciudades como Poznań (Polonia) han tenido que retirar sus flotas de autobuses de hidrógeno debido a fallos técnicos y a los elevados costes de las reparaciones.
El cambio hacia flotas de autobuses 100 % eléctricos está reportando grandes beneficios a las ciudades europeas. Con estos vehículos de pasajeros se reducen los costes de explotación, mejorando la eficiencia del transporte público. La calidad del aire en los entornos urbanos también mejora al eliminar los gases contaminantes, lo que repercute en una mejor salud pública. Además, los autobuses eléctricos reducen la contaminación acústica, contribuyendo a ciudades más habitables.
Si la tendencia actual se mantiene, los expertos apuntan a que en 2027 todos los nuevos autobuses urbanos vendidos en Europa podrían ser ya cero emisiones, con el modelo eléctrico de batería como el claro vencedor del transporte público del futuro. Al menos, hasta ahora.
Fuente | motorpasion.com