Las ventas de coches eléctricos en España no es que no terminen de arrancar: es que están cada vez más congeladas. Como muestra de ello un botón, en 2023 la cuota de mercado alcanzó el 5% por ciento (lo que supone unas 50.000 unidades matriculadas). Eso, comparado con por ejemplo países tan cercanos como Portugal, donde la cuota roza el 20 por ciento, es la primera prueba de que el coche eléctrico puro no despega en España.
Pero hay un dato todavía más desastroso y es que en 2024 la cuota (a no ser que vivamos unos meses de noviembre y diciembre anormales en el mercado) ni siquiera va a alcanzar ese 5 por ciento. Desde asociaciones de fabricantes como ANFAC el anterior presidente Wayne Griffiths se hartó de pedir medidas al Gobierno para revertir la situación y apenas consiguió un Plan Moves III que funciona tan mal como el primero.
Multas que fuercen a vender más coches eléctricos
Ahora, el nuevo responsable de Anfac, Josep María Recasens también ha mostrado su absoluto compromiso con el coche eléctrico y su apuesta total y estratégica para el sector del automóvil en España… pero las nuevas medidas siguen sin llegar. El panorama para 2025 parece sombrío entonces, a no ser que (de nuevo) la Unión Europea sea la que sacuda el tablero con una decisión que puede ser el verdadero trampolín para para los vehículos 100/100 electrificados.
La decisión es capital, porque afecta a las emisiones máximas que pueden declarar los fabricantes de coches. Las normas de la UE para 2025 establecen un objetivo medio de emisiones de CO2 por flota de aproximadamente 95 gramos por km para 2025, frente a los 106,6 g/km de 2023. En ese sentido, los fabricantes que no cumplan la normativa se enfrentarán a multas potencialmente multimillonarias.
Según estimaciones de la patronal europea de fabricantes, ACEA, las sanciones podrían alcanzar los 13.000 millones de euros para turismos y otros 3.000 millones en furgonetas. Por eso, desde esta entidad han solicitado a la UE un retraso de dos años del objetivo de 2025 para los fabricantes de automóviles. Y también desde algunas marcas que no han puesto en la electrificación de su gama y siguen vendiendo todo tipo de tecnologías en sus motores.
Comprar coche ahora o esperar a 2025
Por eso, ¿qué va a pasar con ellos el año que viene? ¿Se arriesgarán a dejar de vender coches de combustión para no pagar la multa? ¿Será justo esta medida el acicate para que el mercado se inunde coches eléctricos? O… más preocupante para el usuario, ¿van a preferir seguir vendiendo coches de combustión, pagar la multa y repercutir esa factura en el precio de los coches?
Por si esta última posibilidad fuera la empleada por algunas marcas, mi consejo esta vez es muy directo: si estás pensando comprar un coche en estos meses, mejor hazlo antes de que termine el año. No se sabe que pasará en 2025, pero en 2024 el precio se va a mantener y así te aseguras que no haya sorpresas en 2025. A la contra, si estás pensando en un coche eléctrico, 2025 puede ser el mejor año, tanto por la cantidad de nuevos modelos como por su precio, ya que varios se han anunciado incluso por debajo de 20.000 euros.
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