Actualmente, la cantidad de “hidrogeneras” es suficiente para que varias compañías de taxis los incorporen, y si bien el automóvil es más caro de uno similar con tecnología eléctrica, la diferencia no es tan grande, ya que la versión de acceso tiene un precio de unos 65.000 euros. La gran ventaja de los Mirai radica en una autonomía mayor a la de los autos a batería, y al tiempo de carga, que es mucho menor con solamente 5 minutos conectado al pico de hidrógeno para completar sus tres tanques, contra los casi 30 que demanda un auto eléctrico.
Tecnológicamente, debajo del capó de un Mirai, una celda de combustible convierte el hidrógeno en energía eléctrica a través de un proceso químico llamado electrólisis inversa. En esa transformación, el vapor de agua se elimina y el hidrógeno se convierte en electricidad para alimentar el motor eléctrico de 130 kW/182 CV de potencia. La sensación al conducirlo es exactamente la misma que la de un auto eléctrico, porque la propulsión es igual a aquel.
Así como los autos eléctricos se denominan EV (Electric Vehicle) o BEV (Battery Electric Vehicle), los híbridos enchufables son PHEV (Plug-in Hybrid), y los híbridos convencionales se denominan HEV (Hybrid Electric Vehicle), estos vehículos propulsados gracias a hidrógeno se llaman FCEV (Fuel Cell Electric Vehicle).
Si bien Toyota es la marca que más fuertemente ha apostado por esta tecnología, otras marcas como BMW, Hyundai y Honda también lo están haciendo. Los alemanes lo han aplicado al SUV iX5 Hydrogen, los coreanos al SUV compacto Nexo y los japoneses en la berlina Clarity Fuel Cell.
Este lunes, BMW anunció en Münich, el comienzo de la segunda fase de desarrollo de su proyecto luego de cuatro años con el iX5 Hydrogen, ya que una flota de casi 100 unidades se empleará a nivel internacional con fines de demostración y prueba para varios grupos objetivo.
Oliver Zipse, presidente del Consejo de Administración de BMW AG, dijo en el lanzamiento de esta etapa que “el hidrógeno es la pieza que falta en el rompecabezas cuando se trata de movilidad libre de emisiones. Una tecnología por sí sola (en referencia a la electricidad) no será suficiente para permitir una movilidad climáticamente neutral en todo el mundo”.
Así como se usan en taxis, los sistemas de propulsión Fuell Cell son óptimos para vehículos que requieren estar circulando constantemente con paradas muy breves para repostar. Por esa razón otras compañías como Renault Master H2 Tech, Peugeot con su versión e-Expert Hydrogen y Citroën con el e-Jumpy Hydrogen los están comenzando a comercializar en sus furgones de carga mediana para transporte urbano y suburbano, mientras que Hyundai continúa desarrollando sus camiones de larga distancia con su flota Xcient Fuel Cell que circulan desde hace más de un año en Suiza.
Infobae