China consolida su dominio en el sector eléctrico: ya no compite con otras marcas, sino con el tiempo
China se posiciona como una potencia prácticamente imbatible, y aún más tras la última noticia que ha llegado desde Asia. El país asiático se está consolidando como un contendiente insuperable, sobre todo tras el reciente acuerdo estratégico que ha firmado. Ahora, su reto principal ya no son las marcas occidentales, sino vencer al tiempo y acelerar la llegada del futuro.
Un claro reflejo de esta transformación se observa en la situación de los fabricantes internacionales, que están siendo desplazados del mercado chino por el auge imparable del vehículo eléctrico. Durante años, las marcas extranjeras dominaron la industria automotriz en China. Hoy, sin embargo, los fabricantes chinos ofrecen vehículos con precios ajustados y tecnologías de vanguardia, lo que les permite superar incluso a gigantes como Tesla.
Durante abril, en Europa se matricularon por primera vez 7.231 coches eléctricos de origen chino, superando ligeramente a Tesla, que registró 7.165 unidades, según datos de JATO Dynamics.
China lidera el mercado global del coche eléctrico
Las empresas chinas controlan actualmente el 76% del mercado mundial de vehículos eléctricos e híbridos enchufables, tal como lo confirma un informe de Rho Motion. En Europa, la penetración de estas marcas varía dependiendo del país, pero su crecimiento es innegable.
La clave del éxito: baterías más duraderas y alianzas estratégicas
Luego de que los fabricantes chinos lograran superar a Tesla en su propio terreno, el país asiático ha encontrado una fórmula clave: el desarrollo de baterías con mayor autonomía y vida útil. Este avance amenaza con dejar obsoletos a sus rivales.
El descubrimiento proviene de la empresa CATL, una de las principales desarrolladoras de tecnología de baterías. La compañía ha desarrollado un nuevo sistema que podría revolucionar los vehículos eléctricos al alcanzar una densidad energética superior a los 500 Wh/kg.
Además, estas baterías muestran una vida útil significativamente más larga en comparación con las actuales. Aunque las LMB (baterías de metal de litio) ya se consideraban para vehículos de nueva generación y aplicaciones en aviación, hasta ahora no eran viables para su comercialización debido a su durabilidad limitada.
CATL resuelve el talón de Aquiles de las baterías LMB
Para superar este obstáculo, CATL ha implementado nuevas técnicas analíticas para monitorear el comportamiento del litio activo y los componentes del electrolito a lo largo del tiempo. Gracias a estos estudios, se identificaron las causas críticas del deterioro de las celdas, como la degradación del disolvente o la formación de litio inactivo.
Sin embargo, el problema central resultó ser el consumo progresivo de la sal electrolítica LiFSI, que podía llegar a perder hasta el 71% de su masa al final del ciclo de vida de la batería.
Para contrarrestar este desgaste, CATL ha trabajado en aumentar la proporción de esta sal, mejorar la conductividad iónica y reducir la viscosidad del electrolito, lo que extiende notablemente la vida útil de las baterías de litio metálico.
Una hoja de ruta para dominar el futuro del transporte
Como parte de su estrategia de expansión, CATL ha firmado un acuerdo con APM Terminals —filial del grupo Maersk— para desarrollar productos avanzados con servicio postventa y un sistema de reciclaje eficiente de baterías.
Gracias a estos avances, China ya no solo compite: ha superado a sus rivales y se coloca como la indiscutible líder global del coche eléctrico. Una supremacía que empezó a gestarse cuando el país asiático logró lo que muchos creían imposible: redibujar el futuro de la movilidad.
Fuente | ecoticias.com
