La llegada de este fabricante supondría recuperar más de un millar de ex trabajadores de Nissan para producir eléctricos de la china Omoda y de la española Ebro
Hace algo más de dos años que Nissan dejó de producir en las instalaciones de Zona Franca (Barcelona), dejando a miles de trabajadores en situación de paro a la espera de una reactivación de la planta que se ha demorado mucho más de lo previsto.
Y aunque poco a poco ha ido recuperando actividad, e incluso cerca de 600 ex trabajadores han tenido acceso recientemente a un contrato de formación suscrito por el D-Hub, el grupo de empresas liderado por QEV Technologies y BTech, que les permitirá cobrar casi 1.600 euros de febrero a octubre de 2024, siguen a la espera de que se concrete el proyecto que debe reactivar la antigua planta de Nissan en la Zona Franca.
Un proyecto que parece que avanza por buen camino y que el propio ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, ha asegurado que las conversaciones para que la automovilística china Chery se establezca en Barcelona avanzan en la buena dirección y ha apuntado que en cuestión de semanas se podría confirmar el acuerdo.
“Las conversaciones avanzan y espero que en semanas o en poco tiempo tengamos confirmadas buenas noticias”, ha señalado Hereu, en una entrevista concedida a Efe con motivo de la visita del ministro al Mobile World Congress, que se celebra precisamente en Barcelona.
Hub Factory, la sociedad que explota la antigua planta de Nissan en Zona Franca de Barcelona, negocia con la multinacional china un acuerdo para ensamblar en estas instalaciones vehículos de la marca Omoda en el marco de su reciente aterrizaje en Europa, un acuerdo que se podría ampliar con la producción de otros eléctricos de la marca española Ebro, cuyo primer proyecto es una pick-up 100% eléctrica.
Hereu se ha mostrado convencido de la buena salud del acuerdo, en el que trabaja el Ministerio de Industria junto a la Generalitat y el hub de electromovilidad, en el que confían algo más de un millar de extrabajadores de Nissan para hacer realidad la reindustrialización de la planta de Zona Franca.
“Las conversaciones avanzan y espero que en semanas o en poco tiempo tengamos confirmadas buenas noticias para afianzar este gran centro. Tenemos gente muy formada, que viene de una tradición larga, y tenemos el ecosistema perfecto, con proveedores y demás“, ha subrayado el ex alcalde de Barcelona.
Falta infraestructura de recarga
En materia de electromovilidad, el ministro ha reconocido que España debe “acelerar el ritmo” en la implantación del vehículo eléctrico para dejar de estar a la cola de Europa y ha defendido el esfuerzo que está haciendo el Gobierno con los fondos Next Generation en este ámbito.
“Partimos del liderazgo en la producción en combustión y ahora el reto es hacer la transición hacia la electrificación. La semana pasada adjudicamos 170 millones a favor de esta transformación”, ha dicho, para recordar que quedan aún fondos por asignar del PERTE del vehículo eléctrico.
En esta línea, ha afirmado que “seguro que encontraremos las fórmulas para que los consumidores cada vez opten más por la movilidad eléctrica”, tras admitir que “nos toca fortalecer la demanda nacional del vehículo eléctrico e híbrido”.
Pero para ello habrá que avanzar a un ritmo mucho más ágil en lo que a infraestructura de recarga se refiere, pues el propio director general de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac), José López-Tafall, señaló días atrás que aunque en 2023 se han instalado unos 10.000 puntos de recarga para vehículos eléctricos -llegando a la cifra ya de 29.000 emplazamientos-, todavía 9.000 de estas infraestructuras siguen sin están aún operativas.
Voz Pópuli
