No contaminan, no hacen ruido, tienen una respuesta más rápida (porque ofrecen todo el par motor de manera instantánea), tienes ventajas fiscales y de circulación… Estos son algunos de los argumentos a favor de la compra de los vehículos cero emisiones. Pero hay uno que suele ser el que inclina la balanza a su favor en la decisión de compra: el ahorro que se consigue tras varios meses/kilómetros de uso.
Aunque la brecha entre los precios de los coches eléctricos y los térmicos es cada vez menor, siguen siendo difícil encontrar un modelo que teniendo solo en cuenta el valor de compra sea comparable con uno similar de combustión. Per la historia da un giro de 360 grados si lo que se analiza es el coste total de propiedad, es decir, lo que cuesta más lo que hay que pagar durante toda su vida útil.
Es por eso que las cuentas que ha echado la organización de consumidores OCU nos parecen tan interesantes, porque muestran cuál es el ahorro, en euros, tras recorrer 10.000 km con un coche eléctrico y con uno de gasolina.
El ahorro, en euros, tras recorrer 10.000 km con un coche eléctrico y uno de gasolina
Para calcular la diferencia entre lo que cuesta recorrer 10.000 km con un coche eléctrico y con uno de gasolina, los expertos de la OCU han tomado como referencia el un consumo anual de 2.000 kWh y de 7 l/100 km, con los precios medios para la luz y el carburante del mes de noviembre de 2023.
El resultad es el siguiente:
- El coche eléctrico ha gastado 470 euros en las recargas necesarias para afrontar los 10.000 km fijados en la prueba
- El conductor del modelo combustión ha pagado 1.145 euros en gasolina en el mismo tiempo/recorrido; una cifra que baja hasta 970 euros si en combustible es diésel
En resumen, el ahorro, en euros, tras recorrer 10.000 km con un eléctrico es de 675 euros.
Teniendo en cuenta que un vehículo eléctrico cuesta unos 10.000 euros más que uno de combustión, la diferencia se amortiza tras recorrer 130.000 km.
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