Nueva York solo quiere taxis eléctricos, pero los VTC de Tesla colapsan ya los supercargadores de la ciudad

Los Supercargadores de Tesla en Nueva York han tenido trabajo extra en los últimos días. Y es que el ayuntamiento neoyorquino sorprendió a todos el año pasado anunciando una medida drástica e inédita: la conocida como Green Rides Iniciative marca la obligación a taxistas y conductores VTC de realizar sus viajes en coche eléctrico para el año 2030.

Una decisión arriesgada y que se podría demostrar demasiado ambiciosa, sobre todo teniendo en cuenta que el año pasado la ciudad de la luz contaba únicamente con unos 200 cargadores rápidos de acceso público en la ciudad, y un millar aproximadamente de cargadores de tipo 2.

Tanto el ayuntamiento como diferentes empresas privadas, incluida Tesla, ya anunciaron que se llevaría a cabo una expansión progresiva de las estaciones de recarga en la ciudad neoyorkina. Y más les vale acelerar el ritmo si no quieren que se sucedan casos como los que se vivieron hace apenas unos días allí, al otro lado del Atlántico.

Largas colas para usar los Supercargadores neoyorkinos

¿Cuántas veces hemos visto la escena de decenas de vehículos haciendo cola en una gasolinera para repostar? Ahora lo puedes ver con vehículos eléctricos de la marca Tesla: las imágenes tomadas allí tienen como protagonistas a los vehículos de la compañía Uber y a los famosos Supercargadores de Tesla.

Después del anuncio de la ciudad de Nueva York de obligar a las compañías de taxi y VTC, como Uber y Lyft, de disponer únicamente de coches eléctricos para el 2030, se abrieron precisamente 10.000 nuevas licencias de coches eléctricos para estos últimos conductores. La gran mayoría de profesionales se decantaron por los vehículos de la compañía de Elon Musk, sobre todo por los importantes descuentos que se ofrecen gracias a la colaboración de Tesla y Uber.

Ahora, se han encontrado con un importante cuello de botella en los Supercargadores, con colas larguísimas de vehículos esperando para cargar sus baterías, como puedes ver en los tweets que os compartimos. Esto ha obligado a Tesla a implantar en estas estaciones de carga su nueva «tarifa de congestión», por la cual se cobra un recargo de 1 dólar por minuto cuando el vehículo ya ha cargado el 90% de su batería.

Algunas compañías como Revel, que tiene su propia flota de vehículos eléctricos en Nueva York y también con gran presencia de vehículos Tesla, supo anticiparse a este problema y cuenta con sus propios espacios para recargar sus coches eléctricos en la zona. No obstante, estos puntos de recarga están abiertos a todo el público, por lo que otros conductores no se han hecho esperar.

En declaraciones para Electreck, Revel ha detectado un aumento de casi 4 veces el uso de sus cargadores en los últimos dos meses, algo que se espera que crezca en los próximos meses: «Anticipamos un aumento aún mayor a medida que más conductores busquen saltarse las largas filas y venir a cargar con nosotros».

El alcance de estas colas está llevando a los conductores a trasladar sus procesos de carga al estado vecino, Nueva Jersey. No obstante, Tesla podría implantar muy pronto más estaciones de carga en la propia región y ya están previstas para este 2024 una estación más en Brooklyn y otra más en Staten Island.

Lo que ha quedado patente es que la decisión de Nueva York de implantar la iniciativa Green Rides está ya surtiendo efecto. El objetivo hasta 2030 es el de ir marcando objetivos intermedios: para este 2024, se prevé que el 5% de los viajes de Uber y Lyft sean ya 100% eléctricos; en 2025 se subirá al 15%, 25% en 2026, 40% en 2027… y así hasta llegar a la totalidad al inicio de la próxima década.

El Ayuntamiento de Nueva York atribuye el 4% de dichas emisiones contaminantes a los taxis. No obstante, la Green Rides Iniciative abre una excepción a los motores de combustión: en realidad, la exigencia para el 2030 es que taxis y VTC utilicen vehículos eléctricos o, en su defecto, vehículos adaptados para sillas de ruedas (sin necesidad de ser eléctrico). Además, como en la Unión Europea, se prohibirá la venta de coches nuevos que no sean eléctricos a partir del 2035.

Los conductores de este tipo de vehículos de transporte de personas en Nueva York pueden acceder a incentivos estatales y federales: por ejemplo, el programa Drive Clean Rebate de la ciudad neoyorkina ofrece una ayuda de hasta 2.000 euros; el crédito fiscal federal alcanza los 7.500 euros de ayuda. De forma añadida, tienen un descuento del 15% en las estaciones de recarga públicas.

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