Los vehículos diésel con más de una década de antigüedad y los de gasolina con más de 15 años tienen los días contados en Delhi. La ciudad ha impuesto una restricción que impide a estos automóviles abastecerse de combustible en las estaciones de servicio, con el objetivo de reducir la grave contaminación que afecta a la capital India.
El envejecimiento del parque automovilístico, un problema creciente
El sector del automóvil atraviesa una crisis debido al envejecimiento de los vehículos en muchos países, especialmente en Europa y España. Según un reciente informe de ANFAC, la edad media del parque móvil español supera los 14 años y medio. “En 2024, aún circulaban más de 8,5 millones de coches con más de 20 años de antigüedad”, explicó José López Tafall, director general de la asociación.
Este envejecimiento no solo frena el mercado de vehículos nuevos, sino que también implica el uso de tecnologías obsoletas, menores niveles de seguridad y emisiones contaminantes más elevadas. Precisamente, este último punto ha sido clave para que las autoridades de Delhi adopten medidas drásticas contra los vehículos más antiguos, responsables de una parte significativa de la polución urbana.
Una ciudad asfixiada por la contaminación
Delhi es una de las urbes con peor calidad del aire en el mundo. Su área metropolitana alberga más de 30 millones de personas y tiene una presencia muy baja de vehículos eléctricos. En el otoño pasado, los niveles de polución alcanzaron cifras peligrosas para la salud.
Hasta 2010, los automóviles diésel dominaron el mercado en la capital india. Sin embargo, 15 años después, muchos de estos coches siguen en circulación, contribuyendo a que la contaminación se mantenga en niveles alarmantes. Para intentar frenar este problema, las autoridades han tomado diversas medidas en los últimos años.
Desde 2015, se prohibió la circulación de coches de gasolina con más de 15 años y diésel con más de 10. En 2021, el gobierno local instó a los propietarios de estos vehículos a reemplazarlos por modelos más modernos, pero la medida no tuvo el impacto esperado.
Ahora, el gobierno ha optado por una nueva estrategia: impedir que estos coches puedan repostar en las gasolineras de la ciudad. A partir de finales de marzo, las estaciones de servicio tienen prohibido suministrar combustible a vehículos de gasolina con más de 15 años y diésel con más de 10. Para garantizar el cumplimiento de esta norma, el Departamento de Medio Ambiente de Delhi ha desplegado equipos de inspección con cámaras de alta tecnología capaces de identificar los modelos que superen el límite de antigüedad.
Esta prohibición supone un gran obstáculo para los propietarios de vehículos antiguos. Sin embargo, el gobierno no ha planteado incentivos o ayudas para la renovación del parque automovilístico, lo que dificulta que muchas personas puedan reemplazar su coche por uno más nuevo, especialmente aquellas con menos recursos económicos.
¿Podría aplicarse una medida similar en Europa?
Por el momento, parece improbable que se adopte una restricción de este tipo en Europa. Los niveles de contaminación en las ciudades europeas, aunque preocupantes en algunos casos, están lejos de alcanzar los valores registrados en Delhi. De hecho, en los últimos años, muchas urbes han logrado reducir sus emisiones gracias al crecimiento en la venta de vehículos electrificados, incluyendo híbridos y coches con cero emisiones de carbono.
FUENTE / hibridosyelectricos.com